Representantes de la comunidad se reunieron con la Senadora Carmen Gloria Aravena para pedirle apoyo en lograr que se les otorgue la recepción de obras del establecimiento, autorización que por burocracia y papeleos no se ha entregado en todo este período de tiempo.
Un verdadero drama viven los habitantes de la fronteriza localidad de Quiñenahuín, en la región de La Araucanía, debido a que el moderno Liceo Científico Humanista que terminó de construirse hace siete años (en reemplazo de la anterior escuela técnico agrícola que se incendió), con el aporte de dos fundaciones que hoy son los sostenedores, aún no puede funcionar porque el recinto no cuenta con la recepción por parte del Departamento de Obras de la Municipalidad de Curarrehue.
Los motivos de esta larga tramitación, según explican vecinos del lugar, es que pese a haber presentado todos los documentos que les ha solicitado el municipio para entregar el permiso, siempre aparece una nueva solicitud o requerimiento por parte de la autoridad edilicia a cargo de la recepción de obras, impidiendo que se habiliten las instalaciones para que el liceo comience a funcionar.
Esto ha obligado a las familias de la localidad a ubicar a sus hijos en otros colegios de comunas más alejadas, como Villarrica, Pucón y Freire, con el costo adicional que eso implica por el traslado y alojamiento que deben financiar. Si bien está la opción de llevarlos a la escuela de Curarrehue, para los habitantes de Quiñenahuín, no es una opción, debido al mal estado de las instalaciones de ese recinto, según relatan.
Nadia Llancafilo, es representante de la Agrupación de Mujeres Cordilleranas de Quiñenahuín, que congrega a mujeres mamás de esta localidad, que están bregando para que el Liceo Científico Humanista quede habilitado el próximo año y sus hijos puedan estudiar en él.
La dirigente indica que el edificio del colegio se hizo mediante una significativa inversión que involucra aportes desde distintos países, que permitió construir unas instalaciones muy modernas, que “lamentablemente no se pueden usar y que se están deteriorando debido al paso del tiempo”.
Así y todo, los sostenedores y la comunidad trabajan conjuntamente para mantener el recinto en buenas condiciones, a la espera que el centro educacional quede habilitado desde el punto de vista de las instalaciones, ya que en lo que se refiere a la autorización del Ministerio de Educación, existe luz verde para iniciar el proyecto educativo que contempla matrícula para 120 alumnos, incluida la formación para personas adultas.
En ese contexto, se contactaron con la Senadora republicana Carmen Gloria Aravena para reunirse con ella y ver caminos de apoyo para acelerar el proceso de tramitación de recepción de la bora y de esa forma no tener impedimentos para funcionar.
“Aquí hay que entender que se está desperdiciando una infraestructura muy valiosa, que además de entregar educación a los niños de esta localidad, les facilitará mucho la vida a sus habitantes, porque no tendrán que salir del lugar para que sus hijos estudien. Por eso, cuesta comprender esta larga tramitación, porque es un proyecto que va en directo beneficio de una comunidad que de por sí vive en condiciones extremas, en un área fronteriza con Argentina y con deficiente conectividad terrestre por el mal estado en que está la ruta que une a Quiñenahuín con Curarrehue”, afirma la legisladora.
Toda la esperanza de esta comunidad está puesta en la posibilidad de que se destrabe este permiso y el próximo año puedan echar a andar este soñado proyecto. “No se puede jugar con la esperanza y el anhelo de muchas familias, que ven en este liceo una oportunidad de desarrollo para sus hijos y toda la comunidad, por lo que realizaremos las gestiones pertinentes para lograr que el recinto esté funcionando lo antes posible”, concluyó la Senadora Aravena.
Deja un comentario