El pasado viernes, la Municipalidad de Villarrica a través del Departamento de Desarrollo Rural en coordinación con el INDAP, dio inicio a la entrega de apoyo especial a familias ganaderas y de apicultores que se encuentran afectadas por la emergencia agrícola decretada el pasado 06 de marzo en la región de La Araucanía.
Durante la jornada del viernes, el alcalde de Villarrica, Pablo Astete, informó que tras reunirse la semana pasada con el Consejo Operativo de Emergencia Regional, en relación a la situación que afecta a más de 3 mil 226 familias de Villarrica por el creciente déficit hídrico que afecta a la zona, se hizo llegar el tercer catastro a las autoridades regionales a fin de disminuir el efecto negativo de la falta de agua en los diferentes sectores rurales afectados por esta emergencia.
La máxima autoridad comunal dijo que en la comuna, son cerca de 60 mil cabezas bovinas y ovinas que están complicados, además de los apicultores que también se encuentran afectados por esta situación. “Le solicitamos al intendente regional y a las autoridades de gobierno que nos apoyen en la entrega de la ayuda por la emergencia agrícola que ya comenzó a entregarse en coordinación con nuestros equipos técnicos, por parte de Indap a través de un bono para compensar y paliar en parte esta emergencia agrícola. Los funcionarios municipales están tomando contacto con los diferentes dirigentes de todos los sectores para establecer la fecha de entrega de este bono en cada territorio”, sostuvo.
El jefe comunal, dijo que se solicitó al intendente regional y al ministro de agricultura que se incluyan todas las familias afectadas, no solamente las que forman parte de los programas, asegurando que pequeños agricultores y ganaderos reciban apoyo especial de parte del Gobierno para hacer frente a la difícil situación que afecta al sector ganadero por la falta de agua y lluvias.
Además de la ayuda directa a familias ganaderas, el alcalde señaló que se está realizando una coordinación con el Instituto Nacional de Investigaciones Agrarias Inia Carillanca, quienes están realizando un monitoreo de las condiciones y efectos de la erupción sobre las praderas y el agua, además de la coordinación con el SAG para desarrollar un plan de identificación ganadera, con el objeto de elaborar una estrategia para abordar una posible evacuación ganadera en la eventualidad de una erupción volcánica.
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